Año nuevo, vida nueva... cerramos otra etapa y abrimos la ventanas
a nuevos propósitos; dejo sencillamente que las cosas sucedan... sin más... a
cada paso nuevo acontecimientos y con ellos nuevas respuestas y nuevos retos.
Así que retomo el propósito de este blog y voy a compartir algunos
remedios y trucos caseros que durante el tratamiento me ha ayudado a sobrellevar
los efectos secundarios derivados de ellos. Como siempre, recordar que ni soy
médico, ni terapeuta, ni aleccionadora... simplemente comparto mi experiencia
con el mundo virtual por si a alguien puede interesarle...
QUIMIOTERAPIA:
Durante este tratamiento pueden aparecer, o no, algunos efectos
poco deseables que podemos paliar con ayuda de lo que la madre naturaleza nos
brinda.
La alopecia suele
aparecer la mayoría de veces afectando a nuestra imagen y autoconcepto de diversas
maneras. En mi caso, afectó a la zona del cráneo, bello corporal y debilitando
un poco las pestañas. En el momento en el que el pelo empieza a caer, preferí
pedir ayuda a mi entorno y sencillamente me rapé literalmente. Esa zona es especialmente
sensible y máxime en época de frío, así que los pañuelos fueron un complemento
más. En el momento del aseo hay que ser delicados a nivel craneal y yo
procuraba no restregarme demasiado y usar pastillas de jabón natural con efecto
hidratante o jabón líquido neutro con un máximo de tres o cuatro
componentes. Acabada la ducha, me embadurnaba de aceite (pepita de uva,
almendras dulces, albaricoque, coco...) incluyendo rostro, cuello y cabeza para
paliar la deshidratación que sufre la piel. Sin olvidar aplicar un poquito de aceité
de ricino en las pestañas y cejas para fortalecer el bello.
Para sentirnos más a gusto (lo de “guapas” no me acaba de
encajar), podemos utilizar alguna BB cream o CC cream natural para aportar un tono
más uniforme al rostro y evitar el exceso de químicos en nuestra piel; marcar
colorete y quien quiera y pueda (no es mi caso) marcarse bien los labios. Si
conseguimos un buen producto, lo más respetuoso posible, que cubra nuestras
ojeras y nos aporte algo de luz, conseguiremos que nuestra mirada se vea más
despejada y luminosa. Podemos enmarar el ojo o sombrearlo de manera que éste resalte,
marcando la cuenca y añadiendo algún color chillón; tengo los ojos azules y las
sombras naranjas me apasionan.... Además, soy amante de la máscara de pestañas
pero en este tiempo prescindí de ella para fortalecer y conservar las pestañas
que quedaban. Ah!!!! el sol y su vitamina D son nuestros aliados en las horas
en que ésre no es perjudicial; mientras tanto mejor protección. Me han salido
varias manchas oscuras en la cara a pesar de las prevenciones. Si rebuscáis
encontrareis cremas solares naturales a base de óxido de zinc.
No os olvidéis de ser transgresoras con los pañuelos. Algún
sencillo truco es hacerse con un pañuelo en un tono básico (blanco, negro,
gris, marrón...) y sobre él pasar otro de colores vivos o que hagan juego con
vuestra indumentaria; podéis anudarlo al costado y tejer una larga trenza con
ambos pañuelos. Poneros clips con flores, mariposas.... lo que queráis!!! Es
vuestro momento!!!!
Para las náuseas podéis
preparar un té de jengibre o bien añadir un trocito de raíz a vuestra infusión
favorita. Yo también lo adquirí en pastillas para llevármelo a todas
partes. Y para los más sensibles a los olores, en el cual me incluyo la
primera, siempre tenía a mano un pañuelito de tela sobre el que impregnaba
aceites esenciales, según el día y el estado de ánimo… iba desde la flor de naranjo,
la lavanda, la mirra, la menta….
Otra joya para tener siempre a mano en nuestro botiquín familiar
es el kuzú (pueraria lobata); es
un almidón extraído de una raíz volcánica que es molido, lavado y secado al
aire; tiene un color blanco y aspecto de piedras polvorosas y es utilizado para ayudar
a regenerar, limpiar y sanar nuestros intestinos, incidiendo en la regeneración
de nuestra flora intestinal. Es especialmente eficaz tanto en casos de diarrea
como estreñimiento, equilibrando su estado y, de igual modo, en caso de
vómitos. En casa lo utilizamos tanto los adultos como los menores. También está
indicado en casos de fatiga crónica y como regenerante de las mucosas respiratorias.
Para prepararlo diluimos una cucharadita de kuzú molido (si lo manipulamos sin
utilizar ningún elemento de metal mejor) en un poco de agua fría; paralelamente
calentamos un poquito de agua sin que llegue a hervir. Agregamos el kuzú disuelto y removemos hasta conseguir una pasta
gelatinosa cuasi transparente. Se puede dejar entibiar e ir tomando durante el
día. Por su textura, puede diluirse en zumo de manzana natural si se prefiere,
en especial para los más pequeños.
RADIOTERAPIA:
Esta vez no quería pasar por lo mismo que la vez anterior en que
el dolor fue una terrible constante. Una buena amiga, me facilitó una homeopatía
muy práctica para este tránsito. Consultad siempre a un especialista antes
de iniciar cualquier toma o adquirir cualquier medicamento. Tomaba la homeopatía
durante todo el día.
Para fortalecer el sistema digestivo y lubricarme interiormente, tomaba,
y sigo tomando, jugo de Aloe Vera, un chupito antes de cada comida
principal; y justo después de acabar cada sesión también lo tomaba.
Una buena manera de alcalinizar, oxigenar y liberarnos de metales
pesados, es tomar un baño de agua caliente con sal. Procuraba no mojar
la zona afectada y además añadía al agua una infusión de "hierba de
pescado" que compré a Josep Pàmies y su equipo en que se considera que
esta libera de radioactividad.
También me fueron de gran ayuda los cataplasmas con cola de
caballo. Infusionaba la hierba mencionada, la mezclaba con arcilla verde y
la misma hierba. Lo untaba justo en la zona a tratar y me cubría con papel
film. Cuanto más avanzado el tratamiento más irritada tenía la piel y menos me
apetecía aplicármelo sobre la zona. La cola de caballo es muy conocida por sus
efectos diuréticos, depurativos y regenerativos de los tejidos celulares,
ayudando a reducir los tumores sin efectos secundarios.
Un gran encuentro y descubrimiento ha sido la zeolita, un
mineral de origen volcánico con alto poder desintoxicante, ayudando a deshacernos
de metales pesados, toxinas y contaminantes, causando efectos antioxidantes e
inmunoestimulantes.
Y como no, acabar el capítulo haciendo especial mención a las algas.
Adoro las algas!!!!! Y toda la sabiduría que poseen del mar. Son destacables
sus propiedades nutritivas y medicinales aportando más minerales que las
verduras comunes y por su poder desintoxicante (contiene ácido algínico),
ayudándonos a combatir las toxinas acumuladas en nuestro cuerpo y a expulsarlas
de manera natural. Su consumo regular nos asegura mantener nuestros órganos internos
limpios y a reforzar el sistema inmune.
Además de las algas más conocidas para uso culinario (espagueti de
mar, kombu, nori, wakame, dulse, kelp…), la chlorella y la spirulina ocupan
un lugar privilegiado.
La Chlorella es un alga verde
unicelular conocida por su capacidad para eliminar toxinas y metales pesados. Además
posee el mayor porcentaje de clorofila del planeta y es uno de los alimentos
más completos.
La Spirulina es una
cianobacteria que tiene forma de espiral y es de color azul verdoso. Se conoce
como un superalimento que ofrece proteínas más digeribles, además de contener múltiples
nutrientes (vitaminas, minerales, ácidos grasos, clorofila…). De esta manera es especialmente eficaz en casos de
anemia, desmineralización y agotamiento por su alto contenido en hierro asimilable,
beta carotenos, vitamina B12 y ácido gama linoleico, así como vitamina E, calcio,
fósforo y magnesio.
Como siempre, excelente!!! Da gusto leerte!! Ya quisieran muchos medicos hablar como tu contener tanta sabiduria!! Espero q la salud publica comprenda un dia la importancia q tiene para la calidad d vida compaginar os tratamientos quimicos y los naturales!! Tq hermana
ResponderEliminarMerche, opino igual que tu hermana, ya quisieran muchos....es increible la información que nos aportas con tu experiencia. Un abrazo grande!
ResponderEliminarEt vaig seguint! :*
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