martes, 19 de enero de 2016

Remedios y trucos caseros.

Año nuevo, vida nueva... cerramos otra etapa y abrimos la ventanas a nuevos propósitos; dejo sencillamente que las cosas sucedan... sin más... a cada paso nuevo acontecimientos y con ellos nuevas respuestas y nuevos retos.

Así que retomo el propósito de este blog y voy a compartir algunos remedios y trucos caseros que durante el tratamiento me ha ayudado a sobrellevar los efectos secundarios derivados de ellos. Como siempre, recordar que ni soy médico, ni terapeuta, ni aleccionadora... simplemente comparto mi experiencia con el mundo virtual por si a alguien puede interesarle...

QUIMIOTERAPIA:

Durante este tratamiento pueden aparecer, o no, algunos efectos poco deseables que podemos paliar con ayuda de lo que la madre naturaleza nos brinda. 

La alopecia suele aparecer la mayoría de veces afectando a nuestra imagen y autoconcepto de diversas maneras. En mi caso, afectó a la zona del cráneo, bello corporal y debilitando un poco las pestañas. En el momento en el que el pelo empieza a caer, preferí pedir ayuda a mi entorno y sencillamente me rapé literalmente. Esa zona es especialmente sensible y máxime en época de frío, así que los pañuelos fueron un complemento más. En el momento del aseo hay que ser delicados a nivel craneal y yo procuraba no restregarme demasiado y usar pastillas de jabón natural con efecto hidratante o jabón líquido neutro con un máximo de tres o cuatro componentes. Acabada la ducha, me embadurnaba de aceite (pepita de uva, almendras dulces, albaricoque, coco...) incluyendo rostro, cuello y cabeza para paliar la deshidratación que sufre la piel. Sin olvidar aplicar un poquito de aceité de ricino en las pestañas y cejas para fortalecer el bello.

Para sentirnos más a gusto (lo de “guapas” no me acaba de encajar), podemos utilizar alguna BB cream o CC cream natural para aportar un tono más uniforme al rostro y evitar el exceso de químicos en nuestra piel; marcar colorete y quien quiera y pueda (no es mi caso) marcarse bien los labios. Si conseguimos un buen producto, lo más respetuoso posible, que cubra nuestras ojeras y nos aporte algo de luz, conseguiremos que nuestra mirada se vea más despejada y luminosa. Podemos enmarar el ojo o sombrearlo de manera que éste resalte, marcando la cuenca y añadiendo algún color chillón; tengo los ojos azules y las sombras naranjas me apasionan.... Además, soy amante de la máscara de pestañas pero en este tiempo prescindí de ella para fortalecer y conservar las pestañas que quedaban. Ah!!!! el sol y su vitamina D son nuestros aliados en las horas en que ésre no es perjudicial; mientras tanto mejor protección. Me han salido varias manchas oscuras en la cara a pesar de las prevenciones. Si rebuscáis encontrareis cremas solares naturales a base de óxido de zinc.
No os olvidéis de ser transgresoras con los pañuelos. Algún sencillo truco es hacerse con un pañuelo en un tono básico (blanco, negro, gris, marrón...) y sobre él pasar otro de colores vivos o que hagan juego con vuestra indumentaria; podéis anudarlo al costado y tejer una larga trenza con ambos pañuelos. Poneros clips con flores, mariposas.... lo que queráis!!! Es vuestro momento!!!!

Para las náuseas podéis preparar un té de jengibre o bien añadir un trocito de raíz a vuestra infusión favorita. Yo también lo adquirí en pastillas para llevármelo a todas partes. Y para los más sensibles a los olores, en el cual me incluyo la primera, siempre tenía a mano un pañuelito de tela sobre el que impregnaba aceites esenciales, según el día y el estado de ánimo… iba desde la flor de naranjo, la lavanda, la mirra, la menta….

Otra joya para tener siempre a mano en nuestro botiquín familiar es el kuzú (pueraria lobata); es un almidón extraído de una raíz volcánica que es molido, lavado y secado al aire; tiene un color blanco y aspecto de piedras polvorosas y es utilizado para ayudar a regenerar, limpiar y sanar nuestros intestinos, incidiendo en la regeneración de nuestra flora intestinal. Es especialmente eficaz tanto en casos de diarrea como estreñimiento, equilibrando su estado y, de igual modo, en caso de vómitos. En casa lo utilizamos tanto los adultos como los menores. También está indicado en casos de fatiga crónica y como regenerante de las mucosas respiratorias. Para prepararlo diluimos una cucharadita de kuzú molido (si lo manipulamos sin utilizar ningún elemento de metal mejor) en un poco de agua fría; paralelamente calentamos un poquito de agua sin que llegue a hervir. Agregamos el kuzú disuelto  y removemos hasta conseguir una pasta gelatinosa cuasi transparente. Se puede dejar entibiar e ir tomando durante el día. Por su textura, puede diluirse en zumo de manzana natural si se prefiere, en especial para los más pequeños.   


RADIOTERAPIA: 

Esta vez no quería pasar por lo mismo que la vez anterior en que el dolor fue una terrible constante. Una buena amiga, me facilitó una homeopatía muy práctica para este tránsito. Consultad siempre a un especialista antes de iniciar cualquier toma o adquirir cualquier medicamento. Tomaba la homeopatía durante todo el día.

Para fortalecer el sistema digestivo y lubricarme interiormente, tomaba, y sigo tomando, jugo de Aloe Vera, un chupito antes de cada comida principal; y justo después de acabar cada sesión también lo tomaba.

Una buena  manera de alcalinizar, oxigenar y liberarnos de metales pesados, es tomar un baño de agua caliente con sal. Procuraba no mojar la zona afectada y además añadía al agua una infusión de "hierba de pescado" que compré a Josep Pàmies y su equipo en que se considera que esta libera de radioactividad.

También me fueron de gran ayuda los cataplasmas con cola de caballo. Infusionaba la hierba mencionada, la mezclaba con arcilla verde y la misma hierba. Lo untaba justo en la zona a tratar y me cubría con papel film. Cuanto más avanzado el tratamiento más irritada tenía la piel y menos me apetecía aplicármelo sobre la zona. La cola de caballo es muy conocida por sus efectos diuréticos, depurativos y regenerativos de los tejidos celulares, ayudando a reducir los tumores sin efectos secundarios.

Un gran encuentro y descubrimiento ha sido la zeolita, un mineral de origen volcánico con alto poder desintoxicante, ayudando a deshacernos de metales pesados, toxinas y contaminantes, causando efectos antioxidantes e inmunoestimulantes.

Y como no, acabar el capítulo haciendo especial mención a las algas. Adoro las algas!!!!! Y toda la sabiduría que poseen del mar. Son destacables sus propiedades nutritivas y medicinales aportando más minerales que las verduras comunes y por su poder desintoxicante (contiene ácido algínico), ayudándonos a combatir las toxinas acumuladas en nuestro cuerpo y a expulsarlas de manera natural. Su consumo regular nos asegura mantener nuestros órganos internos limpios y a reforzar el sistema inmune.

Además de las algas más conocidas para uso culinario (espagueti de mar, kombu, nori, wakame, dulse, kelp…), la chlorella y la spirulina ocupan un lugar privilegiado.
La Chlorella es un alga verde unicelular conocida por su capacidad para eliminar toxinas y metales pesados. Además posee el mayor porcentaje de clorofila del planeta y es uno de los alimentos más completos.
La Spirulina es una cianobacteria que tiene forma de espiral y es de color azul verdoso. Se conoce como un superalimento que ofrece proteínas más digeribles, además de contener múltiples nutrientes (vitaminas, minerales, ácidos grasos, clorofila…). De esta manera es especialmente eficaz en casos de anemia, desmineralización y agotamiento por su alto contenido en hierro asimilable, beta carotenos, vitamina B12 y ácido gama linoleico, así como vitamina E, calcio, fósforo y magnesio.



jueves, 31 de diciembre de 2015

Desempolvando el cajón...

Último día del año que coincide con el cierre de otra fase... reviso el cajón y compruebo varios post escritos a mano que quería compartir... post llenos de grandes noticias, de ilusión... por prudencia ahí los dejé.... en pocas semanas todo volvía a cambiar.... un revés inesperado...  es curioso experimentar como uno es capaz de besar el cielo y en pocos segundos sentarse en las penumbras del averno.

De nuevo tus cimientos se tambalean... huí de  la consulta... me sentencia agredida, manipulada emocionalmente, incapaz de asumir ni entender, presionada... así que decidí volver una semana más tarde acompañada. Me sentía mucho mas serena, pues ya había empezado a movilizar otros recursos. Es sorprenderte ver como el mundo "conspira" para ofrecerte respuestas, personas... que sosiegan tu camino. Era momento de tomar decisiones, de valorarse a uno mismo y de saber qué es lo que se quiere; ante todo mantener la dignidad y soltar el sufrimiento. Es difícil compartir tanto con familia, como amigos y conocidos ciertos puntos de vista a cerca de la enfermedad y los tratamientos y mucho más determinadas decisiones al respeto de seguirlos o no. Pero me compete a mi... creo que somos demasiado absolutistas en creer a pies juntillas que sólo existe un camino en esta vida. Sólo los que hemos pasado por ello sabemos lo que es y cómo repercute tanto en nosotros como en nuestro entorno más inmediato.

Este nuevo aviso me pone en estado de alerta sobre que debo seguir trabajando en mi, en mis emociones, pero sobretodo en mis creencias.... He podido llegar a entender que me he aferrado a la enfermedad y no he querido soltarla... es como si no fuese capaz de verme si ella.... veía mi imagen asociada a un pañuelo, sentada con hastío en los pasillos de oncología, aferrada a un porth-a-cath que transporta ese amargo veneno y a todos los efectos secundarios.... no podía imaginar a una Merche feliz, dando brincos, riendo a carcajadas, acariciando a mis seres queridos... una y mil veces he querido justificar mis enfados, mi malhumor, mis lágrimas de desesperanza.... quizás era más cómodo sentirse "vísctima de"... No creáis que es fácil "desnudar" el alma y vernos a nosotros mismos.... hay muchas cosas que no me gustan y me duelen....

Ayer acabé un ciclo y hoy a pocas horas de finalizar este año, me siento más segura que nunca; confío en mi, en mi cuerpo, en mis maestros/as,... he buscado un objetivo, he trazado un camino a seguir que ilumine mis actos y mis pensamientos.... abandono definitivamente la enfermedad, acepto y sigo caminando día a día.


jueves, 8 de octubre de 2015

Y después... ¿qué?

Mientras estamos inmersos en los tratamientos, visitas, pruebas, analíticas, TAC…. entramos en una dinámica médica que dificulta muchas veces la realización y planificación de otras gestiones….Pero todo tiene un principio y un fin, el ciclo de la vida…. 

Y los tratamientos acaban… y es entonces cuando podemos llegar a sentirnos como en una línea que discurre de manera paralela a ese monstruo gigantesco llamado “rutina cotidiana”.

Y… ahora, ¿qué?.... un sinfín de preguntas nos acechan, no sólo ya de nuestra situación médica sino sobre el recobrar en cierto modo esa vida anterior… pero ya nada es ni será igual…. Cada persona sufre en mayor o menor medida la sacudida de la enfermedad y de los efectos secundarios de los tratamientos. Actualmente, la legislación no contempla un apartado específico para nosotros/as. Así que, como siempre, a remover Roma con Santiago y activar los mecanismos para afrontar esta nueva situación. 

Os explicaré mi experiencia. Ya desde el día después de la operación supe que mi principal herramienta laboral hasta entonces (la voz) quedaría seriamente afectada, así que pensé que además, al tener un órgano amputado posiblemente se me reconocería un grado de discapacidad. Así que pedí a mi hermana que se cercara a la  oficina de “Benestar Social i Família” y me trajese la solicitud. Acordaros de nuestra querida burocracia que hasta el fin de nuestras gestiones nos acompañará. Para poder hacer una valoración deben de haber trascurrido unos seis meses desde la fecha de  la operación. Yo inicié el trámite antes de tiempo, en previsión de la demora que pudiera conllevar. Trascurridos seis meses, fui citada y atendida por un equipo multidisciplinar (médico, psicólogo y trabajadora Social). Aporté informes médicos actualizados y fui entrevistada por la Trabajadora Social, la cual me informó de los recursos existentes en la red y los “beneficios” para personas con discapacidad, en el ámbito social, laboral y fiscal. En uno dos meses, aproximadamente, obtuve el reconocimiento de grado de discapacidad (Se requiere un mínimo del 33%). 

Sin contar con mayor información, contacté con la Fundación ONCE y me entrevisté con el responsable del área laboral y social. Fue allí donde me informaron de la posibilidad de valoración de una Incapacidad Permanente. Hasta ese momento desconocía por competo esa vía. De manera que, una vez trascurridos doce meses de baja laboral (Incapacidad Temporal) pasar a ser citado por la Seguridad Social; aunque, excepcionalmente, este periodo de Incapacidad Temporal puede alargarse seis meses más (un máximo de 18 meses). A partir de ese omento, se debe de pasar por un Tribunal Médico, en el cual se deben de aportar todos los informes médicos, psicológicos que tengáis. Debo decir que son especialmente estrictos y que los informe deben de llevar fecha, sello del centro médico, nombre completo del facultativo, numero de colegido y firma, ya que sino no se admitirán como válidos. Además de los informes, el tribunal puede ejercer la potestad de revisaros e inspeccionaros para corroborar lo que indican los informes. En mi caso me hicieron despojarme tanto del pañuelo del cuello (para verificar cicatrices), como el de la cabeza, me revisaron la boca…. No fue muy agradable….

Nuevamente, en unos meses, llega la resolución por correo donde se reconoce o no la Incapacidad Permanente, así como el grado asignado. Tenemos el derecho de recurrir la resolución. 

Los grados de Incapacidad Permanente (IP) son los siguientes:

  • IP Parcial: ocasiona una disminución no inferior al 33% para la realización de tu trabajo, pero no impide que puedas realizar tu trabajo habitual.
  • IP Total: te imposibilita para la realización de todas i/o de las tareas fundamentales de tu trabajo habitual, pero no te impide dedicarte a otro trabajo distinto.
  • IP Absoluta: te impide por completo la realización de cualquier profesión u oficio.
  • Gran invalidez: te produce pérdidas anatómicas o funcionales tan severas que necesitas la ayuda de una tercera persona para poder llevar a cabo las tareas de cotidianidad.

El reconocimiento de una Incapacidad, independientemente del grado, lleva asociado el derecho a la percepción de una prestación económica que varía en función del grado que se haya concedido y de tiempo de cotización a la Seguridad Social. Para mayor información podéis dirigiros a la oficina de la Seguridad Social de vuestra zona, ya que se deben de cumplir ciertos requisitos. 

Para contextualizar algo más mi situación, mencionar que, una vez que me fue diagnosticada la enfermedad, me encontraba en situación de desempleo y a los pocos días se me acababa la prestación. De esta manera solicité la baja médica y la tuve que aportar a la Tesorería de la Seguridad Social, de la cual empecé a percibir un mínimo subsidio por Incapacidad Temporal. Nada habría sido posible sin la ayuda de la familia ya que también solicité transporte sanitario y me fue denegado. Esa situación se alargará durante un año y se deberán de aportar cada 4 semanas, como máximo, los partes de bajas y podéis ser citados y requeridos por el Tribunal para certificar ese estado de “baja médica”. Trascurrido ese año pasé por el tribunal Médico, y tengo reconocida una IP en grado de Absoluta. 

Podéis contar con mayor información y apoyo en organizaciones y entidades sin ánimo de lucro que atienden a personas con cáncer o bien a través del/la Trabajador/a Social de referencia en tu localidad.

¡¡¡Que nadie deje de luchar por sus derechos!!!





miércoles, 2 de septiembre de 2015

Un rayo de luz.

Ha amanecido un día gris pero intuía que la luz me iba a acompañar... En este tiempo hemos podido realizar algunos de esas "cosas" pendientes que, por un motivo u otro, siempre posponíamos; ese viaje soñado, esa pequeña chapuza por realizar, ese pequeño gesto por dibujar.... Tiempo de puntos finales, puntos seguidos y puntos suspensivos... Cerrando puertas y abriendo ventanas. Intentando reflexionar sobre el camino recorrido, buscando un sentido, enumerando aprendizajes, secando lágrimas e intentando dibujar más sonrisas. No puedo negar que ya la parte idílica de este periplo quedó atrás, muy atrás. Esta segunda sacudida ha calado hondo en el entorno familiar. Es después del tratamiento en que afloran las emociones contenidas... quizá como adultos seamos capaces de contar con estrategias de afrontamiento  pero... ¿y nuestros hijos/as? Son parte de esta vivencia y la gestión emocional cobra más relevancia que nunca... es momento de buscar apoyo para recomponer nuevamente este rompecabezas familiar.

Sigo viendo que mis pensamientos son anárquicos... quizás sea porque es el corazón el que habla.

Y, como os decía, hoy era un nuevo día crucial.... pospuse esta cita con el oncólogo para poder disfrutar de nuestras ansiadas vacaciones y de ese viaje que tanto anhelábamos sin tener ningún tipo de condicionante. Como siempre, ha sido una espera tensa.... pero el camino recorrido ha valido la pena... los resultados han sido positivos... creo que no he tenido demasiada capacidad de reacción porque tenía en mente un discurso bastante claro que no he tenido que utilizar.... tenía claro que hoy iba a decidir yo. Sólo falta hacer una prueba más porque hay "algo por ahí" que no se sabe muy bien de qué especie es (el informe lo refleja pero la observación realizada hoy no...); dejadme que ironice por favor!!! Aunque la balanza se decanta hacia la total positividad.

No voy a bajar la guardia.... repaso bien todas as pautas que sigo.... pequeños cambios que ya han pasado a ser hábitos y que como veis han dado sus frutos.

martes, 7 de julio de 2015

Geobiología y el síndrome de "las casas enfermas"

Por fin reúno fuerzas y energía para hacer una nueva entrada. Este noveno y penúltimo ciclo ha sido muy duro. Por diversos motivos no he realizado mis sesiones de acupuntura, reiki… y vaya si lo he notado. Han pasado casi cuatro semanas y aún no me siento del todo bien. Las molestias intestinales, mareos, malestar general, cansancio físico y emocional y ahora algún desorden en el ritmo cardíaco. Así que para este décimo y último ciclo no voy a desestimar ninguno de los beneficios que las terapias paralelas que realizo me aportan.

En este post quería compartir mi experiencia sobre la GEOBIOLOGÍA. Un buen día alguien me aconsejó que no estaría de más poder realizar un estudio geobiológico de la casa en la que vivimos, para determinar si era una “casa enferma”. Es sabido que una exposición continuada a determinados tipos de radiaciones puede exponernos al cáncer. ¿De qué sirve entonces mantener una estilo de vida saludable si el hogar en el que vivimos, nuestro “refugio”, no nos ofrece bienestar?

La Geobiología es la ciencia que estudia las energías que emanan de la tierra y la relación que existe entre estas energías y los seres vivos. La finalidad última de la geobiología es mejorar el bienestar y la salud de las personas.

Vivimos rodeados de radiaciones que no se ven pero que afectan a nuestra salud. Estas radiaciones pueden ser naturales (radiaciones que emanan de la tierra y provocan variaciones en el campo magnético y eléctrico de nuestro entorno y pueden debilitar nuestra salud, provocadas por alteraciones geofísicas, redes geomagnéticas o radioactividad ambiental) o artificiales (radiaciones provocadas por las nuevas tecnologías, principalmente).

Así que nos pusimos manos a la obra y el primer paso fue visitar la web de GEA (Asociación de Estudios Geobiológicos) para conocer algo más sobre esta ciencia y solicitar un listado de profesionales. Contactamos con varios de ellos para conocer un poco más su método de trabajo y honorarios.

Tuvimos la gran suerte de contactar con dos profesionales excelentes. Debo hacer mención que su misión, tal y como uno de ellos indicó, “no es hacer negocio con la salud”. Y así fue. Llegaron a casa y nos pidieron que no les contáramos nada para no influir en sus observaciones y diagnóstico.

El estudio geobiológico se realiza mediante la radiestesia (sensibilidad del propio geobiólogo que percibe en su cuerpo, con la ayuda de un péndulo o varillas, los impulsos producidos por ondas geomagnéticas) y los aparatos d detección. De esta manera se realiza un diagnóstico para determinar la posible contaminación emitida por fuentes de radiaciones artificiales que crean contaminación electromagnética y eléctrica que pueden ser generadas tanto por fuentes externas (antenas, transformadores, WIFI….) como internas (revisión de instalación eléctrica, tomas de tierra, aparatos eléctricos, electrodomésticos, teléfonos inalámbrico, router...). Para ello se utilizan aparatos de medidas de radiaciones electromagnéticas de altas y bajas frecuencias. Con demasiada frecuencia no contamos con información veraz sobre las consecuencias de convivir con tanta tecnología que, si bien en ocasiones nos aporta aspectos positivos, en otros, puede dañar seriamente tanto nuestra salud como la del resto de miembros de la familia. Y no digamos la indefensión que puede llegar a provocar la instalación  por "decreto ley” de antenas de telefonía en las terrazas de comunidades de vecinos.

En cuanto a las radiaciones naturales, tal y como he mencionado anteriormente, que pueden ser provocadas por alteraciones geofísicas (existencia de aguas subterráneas o fallas geológicas), redes geomagnéticas (Líneas Hartmann y Curry) o radiactividad ambiental, es importante descartar que no dormimos sobre una corriente de agua subterránea ya que  puede verse alterado el funcionamiento de la glándula pineal encargada de  la regeneración celular. Además el cruce de dos líneas Hartmann o Curry genera un campo magnético geopático que se ha relacionado con numerosos tumores malignos. Finamente, se realiza la detección con la ayuda de diversos aparatos (brújulas y magnetrómetros, kombi-test para localizar las fuentes de contaminación electromagnética y eléctrica; y contadores geiger que medirán las diferencias de niveles de radioactividad). Cabe destacar que pueden registrarse altos niveles de radiactividad en nuestro entorno cotidiano debido a la composición mineral del subsuelo. El terreno sobre  el que están edificadas nuestras viviendas puede contener granito y arcilla, entre otros, que tienen una alta concentración de uranio. Este mineral puede estar presente en determinados materiales de construcción y decoración, como algunos tipos de gres y de cerámicas. En su proceso de descomposición, el uranio emite gas radón que está clasificado por la OMS como la segunda causa de cáncer de pulmón del mundo. El gas radón es inodoro, insípido e invisible, por lo que una sencilla medida de prevención es garantizar la ventilación de nuestra casa. En España las mayores concentraciones de este gas se sitúan en el centro de la península, en el oeste y noroeste.

Retomando el estudio geobiológico realizado, cada uno de los profesionales dispuso su material de trabajo y empezaron con una observación silenciosa y exhaustiva tanto de los exteriores como del interior de la vivienda. El estudio trascurrió durante casi dos horas. Entre ellos pusieron en común lo que cada uno había determinado y nos dispusimos a saber el diagnóstico:

Sorprendentemente (para ellos), el estudio concluyó que la casa en la que habitamos no sufre ninguna geopatía; simplemente debíamos de mejorar algunos aspectos (cambia el teléfono inalámbrico por uno “fijo”; instalación de interruptores en aparatos de aire acondicionado para que no estén en stand by continuamente; prescindir de algunos aparatos eléctricos con pequeño transformador; ventilar bien la casa y, en especial, el baño, sobre todo después de haber tomado una ducha caliente…). Como curiosidad, nos desaconsejaron las encimeras de granito. Por otro lado, en el patio exterior se detectó una corriente de agua, pero al ser un espacio en el que no se pasan muchas horas no fue necesario adoptar ninguna medida. Ah!!!! Y recordad no dormir con teléfonos móviles encendidos en la mesilla de noche ni en la habitación y cargarlos en estancias lo más alejadas posibles de las zonas de descanso; y,  sobretodo, apagar el WIFI por las noches!!! Pequeños gestos que pueden mejorar nuestra salud.

Si tenéis más interés sobre el tema, nos recomendaron leer a Mariano Bueno, gran pionero y divulgador de alternativas de vida saludable. En este caso concreto nos recomendaron “El gran libro de la casa sana”.



jueves, 21 de mayo de 2015

Mens sana in corpore sano.

Aún acompañada por los efectos post quimio e inmersa en un vaivén emocional, siento la necesidad de volver a escribir, como antídoto de lucha contra la destrucción de la sinapsis (chemo brain).
Después del impacto del diagnóstico, las dudas y los miedos pueden apoderarse de nosotros/as, induciéndonos a posibles situaciones estrés, ansiedad, depresión... Así que es un buen momento para poder desplegar una artillería de recursos que nos ayuden a deshacer ese posible bloqueo emocional. Cabe decir que esa sensación de "incertidumbre" nos acompañará durante un largo periodo de tiempo así que deberemos de convivir con ello o reinventar esa emoción.
En este post quiero compartir mi experiencia a cerca de aquellas técnicas, métodos y/o disciplinas que yo misma he probado y cuál ha sido mi experiencia. Antes de continuar quiero recordar una frase de mi terapeuta que a menudo retumba en mi mente: "el miedo es la antesala de la enfermedad".

  • Reiki: Es una palabra sánscrita que significa REI, energía universal, y KI, energía vital. Es una técnica de canalización y transmisión  de energía vital a través de la imposición de manos que se utiliza para obtener paz y equilibrio en todos los niveles (físico, emocional, mental y espiritual). Por fin es considerada como una terapia complementaria a la medicina convencional y terapias psicológicas reconocida por la OMS. Conocí esta terapia casi por casualidad mientras trabajaba, a través de una usuaria de un servicio de inserción sociolaboral, quien me facilitó una tarjeta de una terapeuta y maestra de reiki que durante dos años permaneció guardada en mi cartera. Una vez recibido el diagnóstico y habiendo sido operada empecé a recibir sesiones de reiki. Estas se prolongaron durante el tratamiento, Quisiera agradecer la labor y trato de la terapeuta que se ofreció para venir hasta casa a darme las sesiones de reiki, gracias Inma, gracias Ma Àngels. Lo que puedo contaros es que se experimenta una agradable sensación de relajación, serenidad, sintiendo fluir la energía a través del calor de la manos del/la terapeuta. En aquel entonces sentía mucho dolor en la zona irradiada y puedo corroborar que una vez realizada la sesión de reiki el dolor había disminuido. En el tiempo en el que el "huésped" me ha permitido olvidarme de él, he podido realizar el nivel I y II con lo cual ahora puedo auto aplicarme reiki. En los días en que los efectos adversos de la quimio se dejan sentir, preparo mi espacio, pongo música y me sumerjo en una sesión de reiki. Quisiera destacar que desde hace un año, aproximadamente, en el Hospital Clínic de Barcelona, los/as usuarios/as del hospital de día (oncología) ya podemos disfrutar de un servicio de voluntarios de reiki. Gracias.
  • Acupuntura: Es una ciencia médica milenaria original de China que consiste en la inserción y manipulación de agujas en el cuerpo, con el fin de restaurar la salud y el bienestar de los pacientes. Estos puntos están ubicados dentro de unos canales invisibles, llamados meridianos, por donde circula la energía. La UNESCO declaró en 2010 la acupuntura y la moxibustión chinas como patrimonio Cultura Inmaterial de la Humanidad. La acupuntura tiene una acción directa sobre el sistema inmunitario, nervioso, hormonal, sanguíneo, oseo-articular, sensitivo, emocional... Equilibra la restauración de los ritmos internos, activando unas funciones y ralentizando otras hasta poner cada cosa en su lugar mediante el fortalecimiento y equilibrio de la energía vital. Entre los múltiples beneficios que he podido experimentar debo destacar la tonificación del hígado y riñones; dos órganos muy castigados durante los tratamientos oncológicos. Tonificación de pulmones, con la consiguiente mejora de la capacidad de respiración. Con todo esto se experimenta una mejora muy significativa de los efectos secundarios de los tratamientos. Además se consigue una mayor sensación de bienestar y equilibrio energético. Una de las primeras sensaciones que me invadieron  de una gran felicidad, fue poder experimentar como después de dos sesiones de acupuntura mi xerostomía crónica había mejorado. Gracias Lluis.
  • Meditación: Este si ha sido uno de los grandes regalos que el camino del cáncer me han traído: observar sin juzgar, dejar fluir, escuchar y reencontrarte con tu ser interior. En este caso podéis encontrar multitud de técnicas, posturas... para mi ha sido importante contar con un "maestro" o guía en este camino, así como la disciplina, la constancia y la práctica. Sumergirse en la respiración para llegar a la esencia es un viaje sensacional. A medida que practicas las sensaciones que experimentas van a más. Es una manera de dominar a la mente que constantemente nos llama a la distracción. Os invito a dejaros embriagar por sus sensaciones, emociones, hallando respuestas, trazando caminos, visualizando, sientiendo... cada cual podrá describirlo como lo haya sentido. Es una excelente herramienta de autoconocimiento y serenidad. Gracias de nuevo Lluis 
  • Kundalini Yoga: Es una técnica ancestral que nace con el objetivo de mantener mente y cuerpo sanos. Es así como a través de las assanas (las posturas), el pranayama (la respiración), la relajación y la meditación, podemos llegar a conseguir un estado de paz interior y tomar conciencia de nuestro cuerpo y mente. Entre los beneficios que me ha reportado cabe destacar el aumento de elasticidad, el aumento de energía y la sensación de bienestar. También quiero destacar que la toma de conciencia en la respiración me ha ayudado a mejorar la función respiratoria, así como la coordinación respiración-habla. Gracias Patricia. 
  • Caminar: Esta ha sido un de las recomendaciones médicas que he recibido por activa y por pasiva: caminar durante una hora al día para fortalecer y restablecer el sistema inmunológico. Con un simple paseo favorecemos la oxigenación de nuestro cuerpo, eliminando toxinas y activando el sistema cardiovascular. Poder pasear cerca del mar, en la montaña abstrayéndote de pensamientos, liberando la mente; tomando conciencia del aquí y el ahora, realizando respiraciones conscientes y gozando de ese instante, la dosis de vitalidad es inmediata. Y si además dejamos que los primeros rayos de sol nos acaricien, el paseo es doblemente terapéutico. Siempre que puedo acabo mi paseíto abrazada a un árbol, descalzándome y dejando sentir la tierra bajo mis pies.

Además de  todo lo mencionado anteriormente, solicité poder recibir apoyo del servicio de psicooncología en el cual he ido a sesiones cada mes y medio, Es un espacio interesante en el que compartir lecturas distintas de una misma realidad, desde el respeto y la objetividad. 
Esta mi pequeña experiencia y os puedo asegurar que aunque suelo permanecer en mi montaña rusa de emociones, todas estas técnicas y disciplinas me ayudan a serenar y a tener mayor capacidad de auto control, de manera que me resulta más sencillo poder manejar y afrontar las situaciones de estrés que la enfermedad pueda generar.

Ya para acabar quiero agradecer de nuevo a mi familia su apoyo, paciencia, compresión e infinito amor. A mis queridas "Tortuguetes"que siempre han estado ahí y que han sido, siguen siendo y serán mi familia extensa y el apoyo logístico, Y a mi amado "Club de las Sonrisas", lo mejor del cáncer, por esa unión tan especial que se ha creado entre personas que pasamos por la misma circunstancia, por encontrar esa mano amiga, ese gesto de complicidad, esa ilusión por seguir viviendo. Gracias.

martes, 5 de mayo de 2015

10 años caminando juntos...

Han pasado diez años desde que nuestros caminos se unieron. No ha sido fácil; hemos reído y llorado.... hemos caído y nos hemos vuelto a levantar; hemos buscado la luz entre las tinieblas... En ocasiones parecía que nuestras diferencias eran insalvables... pero has sido capaz de transformar el defecto en virtud y siempre has estado ahí, en silencio. Sé que has sufrido más de lo debido, en silencio. Has cedido, en silencio. Pero siempre me has acompañado y apoyado. Aún cuando la vida no nos ha dado tregua, has sacado la fuerza suficiente para dibujar un camino más llevadero. Quizás te he exigido demasiado, pero ahora, con retrospectiva, valoro todos y cada uno de tus gestos, de tus palabras, de tus acciones. Creo que este es el momento y la forma de hablar a corazón abierto y declarar mi gratitud y amor hacia ti, aceptándonos y respetándonos. Recuerdo tu entereza y positividad aquel 5 de Noviembre de 2012 cuando supimos el diagnóstico. Me contagiaste de valor y coraje; de fuerza y ganas de luchar.... y eso mismo sucedió dos años después. No sabes lo importante que es saber que me vas a acoger en tus brazos cuando no hallo consuelo; saber que voy a escuchar una palabra de comprensión; que me recordarás que todo esfuerzo tiene su recompensa....  pero sobretodo saber que donde no llega uno llegará el otro.
Este es mi pequeño regalo; estas palabras permanecerán en el tiempo y aunque algún día partamos "los lazos invisibles que nos unen perdurarán por siempre jamás". Te quiero.